Luis García-Baquero Corredera
Comencé mi carrera profesional trabajando como Data Scientist durante 3 años y medio, desarrollando proyectos basados en inteligencia artificial dirigidos a multitud de ámbitos (energía, aeronáutica, salud, comercios digitales, agricultura…), pasando por EDP Renovables, Airbus (su centro de investigación en IA de Toulouse), Emergya y una época en la que ofrecí mis servicios como autónomo, a clientes tanto nacionales como internacionales. Tras ello decidí dar el salto al lado del negocio de la tecnología, incorporándome de nuevo a Airbus en Reino Unido, esta vez como Product Manager.
Actualmente trabajo como AI Product Manager en Experian en su DataLabs de Londres, donde me encargo de concebir nuevos productos digitales, planificar la estrategia de negocio detrás de ellos, y supervisar su desarrollo hasta que son lanzados a mercado. Por otro lado, este año soy miembro del consejo de asesores jóvenes de la OCDE, y tengo una startup de tecnología para smart cities, llamada SingulaCity, con la que estamos en la fase final del Climate Smart Cities Challenge de las Naciones Unidas.
Por un lado, el paso por el Grado en Ingeniería Aeroespacial me ha ayudado, mucho más que con los conocimientos adquiridos, a amueblarme la cabeza y hacerme capaz de enfrentarme a casi cualquier reto intelectual que se ponga delante. Supongo que por eso se suele decir que los ingenieros están muy bien valorados en cualquier profesión, por nuestra capacidad para aprender rápido y resolver problemas.
Por otro lado, la Escuela me ha brindado muchísimas oportunidades para crecer como persona y como profesional, desarrollando las conocidas como soft skills: la gestión de tareas y equipos, la habilidad de negociación o el trato con personas de todo tipo gracias a mi paso por delegación de alumnos y junta de escuela; la capacidad de abordar problemas de negocio de forma exprés gracias al TIMES; un sentido de responsabilidad social en la profesión gracias al aula de ingeniería comprometida; y otros muchas más experiencias que no tengo espacio para describir. Pero sobre todo, gracias a ellas, el haber podido conocer a muchas personas a las que hoy día considero colegas o amigas.